En la noche de ayer se llevó a cabo el cambio de vestimenta de Nuestro Padre Jesús Nazareno y de la Santísima Virgen de la Estrella para la inminente Fiesta de la Pureza de María y el comienzo del Adviento.
Para la ocasión, la Venerada Imagen del Señor porta la túnica de terciopelo morado bordada en plata, junto a las potencias de “las nubes”, unas de las más antiguas que posee. Ciñendo su cintura, luce un cingulo plateado que se remata con dos borlas.
Nuestra Amantísima Titular luce los colores inmaculistas en la indumentaria, conformada por saya blanca brocada y manto azul de terciopelo, que cruza hasta su cintura preservando su bendito vientre, cuya simbologia en el ya cercano tiempo Litúrgico de Adviento nos anuncia el tiempo de Esperanza de María, reforzando su Virginidad y Santidad durante toda su vida, desde su Inmaculada Concepción hasta la misma Encarnación del Señor por obra del Espíritu Santo. Coronando sus sagradas sienes, luce aro de estrellas y a sus pies una medialuna.
Que nuestra Reina y Señora, María Santísima de la Estrella nos siga llenando de su Gracia e interceda por todo su Pueblo de Marmolejo ante el bendito fruto de su vientre, que está a punto de nacer, Jesús el Nazareno.














